¡Hola, Bricolovers! Hoy venimos a explicarte todo lo que debes saber de las pinturas lavables, esto es, aquellas que tienen una alta capacidad de resistencia al frote. Te aseguramos que con este post te vas a convertir en todo un experto y vas a conocer cada una de las características y propiedades de estas pinturas. ¡Corre y descubre todas sus cualidades!
En realidad, ¿sabes lo que son las pinturas lavables?
¡No empecemos la casa por el tejado! Debido a que este tipo de pinturas genera cierta confusión, lo primero que es importante destacar es su definición. Estas posibilitan la limpieza de paredes y/o techos conservando así su estado impecable e intacto; pues al ser de mayor calidad, también tienen un nivel mayor de lavabilidad. Por esta razón, el soporte se mantiene en perfectas condiciones en términos de estética y durabilidad, principalmente. Además, siempre miramos por vuestro bolsillo, ya que con estas pinturas no es necesario pintar periódicamente, por lo que supone un mayor ahorro económico.
¿Pueden utilizarse en cualquier estancia del hogar?
¡Claro, Bricolover! Las pinturas lavables pueden utilizarse tanto en exteriores como en interiores. Por una parte, es perfecta para las zonas abiertas o al aire libre, las cuales se ensucian de manera más fácil y, por otra, también es ideal para determinadas estancias del hogar.
En este sentido, resulta muy útil emplearla en las habitaciones de los niños y en la cocina, pues todos sabemos que estas partes son las más propensas a mancharse.
Y… ¿cómo hay que hacerlo para limpiar las manchas o rozaduras y no estropear las paredes o techos?
¡Muy sencillo! Simplemente, tienes que limpiar el polvo del soporte donde esté la mancha para, después, con un trapo o paño mojado con agua tibia y jabón líquido pasarlo sobre la superficie. Y así, con suavidad y tacto, conseguirás decir ‘adiós’ a esa suciedad manteniendo la pintura en perfecto estado.
Recomendaciones para su mantenimiento:
Como toda pintura, requiere de unos cuidados y recomendaciones para lograr que, con el paso del tiempo, la superficie se mantenga como el primer día y no sea necesario pintarla con asiduidad. Te nombramos algunas para que las tengas en cuenta:
- No se trata de no llevar cuidado de manchar la pared porque se puede limpiar fácilmente, sino de conservarla en el mejor estado posible durante el día a día.
- Limpiar el polvo de las superficies pintadas con pinturas lavables con un trapo seco o plumero de forma periódica.
- Habitualmente, en las paredes aparecen rozaduras provocadas con múltiples objetos. Para ello, lo más efectivo es eliminarlas con las ‘esponjas mágicas’ que básicamente son borradores de manchas.
- Y como ya hemos especificado anteriormente, es fundamental que durante el frote de la mancha, este no se efectúe de manera brusca, sino suavemente.
- Y muy importante, recuerda que:
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¿Te has quedado con alguna otra pregunta? ¡No dudes en comentarnos todo lo que necesites por nuestras redes sociales! Como siempre, estamos encantados de ayudarte para conseguir tus mejores resultados, Bricolover (y que todo el mundo flipe con tus dotes con la pintura).